Las obras en el centro no modificarán las paradas de bus (de momento).

Con el mes de junio comenzaron las temidas obras en el entorno de la Marina y Puerta Real. Se prolongarán por espacio de dos meses (en principio...). El Ideal Gallego destaca ya los primeros problemas en el tráfico de la zona: “No fueron graves porque empezaron tarde, pero es cierto que cuando se juntan dos o tres autobuses en la avenida hay algo de retención”, según fuentes de la Policía Local.


Hasta el momento, las medidas se limitaron a modificar la frecuencia de cambio de disco del semáforo que se encuentra frente a la oficina central de Correos para dar más tiempo para cruzar a los buses y el resto del tráfico que proviene de Puerta de Aires. Sin embargo, la solución puede no ser suficiente en los próximos días, cuando se prevé que haya retenciones puntuales. “Sobre todo a las siete y media de la tarde, al mediodía y a primeras horas de la mañana”, apuntaron desde el 092.

Ahora sólo está cortada la avenida de La Marina, sin un carril desde el callejón de La Estacada hasta la Casa Paredes. En cuanto a la avenida de Montoto, el corte comprende desde la calle de Fama hasta la de María Barbeito, lo que implica la desaparición anunciada de varias plazas de aparcamiento en línea.


Las máquinas han comenzado levantado el asfalto que bordea la acera, tanto de la avenida de la Marina como la de Montoto, lo que elimina un carril en sentido salida de la ciudad. Eso sí, la parada de autobuses permanece intacta y tampoco está previsto eliminarla cuando la obra esté finalizada. Se mantendrán las paradas de autobús y la zona de carga y descarga frente al teatro Rosalía, porque retirarlas significaría dejar la zona “totalmente inoperativo”, como recordó en su día Lareo.

Es de suponer que a medida que avance el proyecto sus repercusiones para el tráfico desciendan, porque está previsto instalar también una mediana de cemento que separe los dos carriles que quedarán, uno en cada sentido y prevenir así el aparcamiento en doble fila. (...)

Los hosteleros se quejan como parte afectada de estas obras, ya que mantienen que el número de clientes se va a ver menguado mientras duren, máxime cuando de fechas veraniegas se trata.
Los pesimistas temen que, con menos plazas de aparcamiento, la zona pierda atractivo para siempre.


A todo esto, la reforma iniciada parece que paliaría en algo la reclamación de los hosteleros, que pedían el cambio de ubicación de la parada del bus de Puerta Real, ya que consideraban que les afectaba el no tener espacio para sus terrazas. Con estas obras en curso se supone que ganarán espacio en las aceras...
En ese mismo post al que os redirigimos podéis ver al final un plano de una posible (¿y futura?) remodelación de la zona, pero en profundidad...

Fuente: El Ideal Gallego
Imágenes: blog busurbano, google maps