Usuaria "pro-Carril Bus" vs Comerciante "contra-Carril Bus". Cada uno habla de la feria...

La Voz de Galicia saca a colación la confrontación de pareceres entre partidarios del Carril Bus y detractores, simbolizadas en una usuaria y una comerciante de la "zona cero". Este es el resultado:

<<Las cosas no se ven igual desde dentro del bus que desde fuera. Dentro, la vía de preferencia se aplaude por todas las ventajas que ofrece al viajero: rapidez, cumplimento de las frecuencias y fluidez en la circulación del vehículo. Fuera, se señala lo que ha dejado tras de sí:

• ...un rosario de bajos con el letrero de Se alquila, 
• ...la eliminación de plazas de aparcamiento y, sobre todo...
• ...la imposibilidad estacionar en doble fila para hacer recados o compras.

Esas son las dos caras, y corresponden, por lo general, con el rostro del usuario del bus y el del comerciante.

Carmen Granados, usuaria del bus

Carmen Granados pertenece al primer grupo.

Vecina de Orillamar, todos los días emplea el 4 para ir a trabajar, aunque también usa otras líneas para hacer recados, ya que su barrio «está muy bien comunicado por bus». Con solo mencionarle el plan diseñado por el Ayuntamiento para el 2012 se le agria el gesto: «Me parece horrible, un auténtico despropósito que estropeará todo lo que se ha avanzado en los últimos años. Que nadie se engañe. Lo de lo que los comercios de San Andrés no funcionen como antes es motivado por la crisis, no por el carril bus».

Expone sus razones: «Yo paso en bus a diario por la calle de San Juan. Antes de que existiera el carril bus allí estaban todos los coches en doble fila. ¿Por qué? Pues porque estaban todos tomando las cañas por ahí, sin importarles el tráfico ni los atascos que causaban. Un montón de veces nos teníamos que parar en la esquina de la plaza de España porque el bus no podía pasar. Y todo hasta que salían del bar y venían a quitar el coche. No creo que haya derecho a eso». Carmen asegura que el cambio con la implantación del carril «fue abismal». No sabe calcular cuántos minutos gastará ahora a mayores por trayecto, pero cree que «se va a notar muchísimo, porque van a aparcar los coches en los dos lados de la calle, cuando antes lo hacían solo en uno».

El reverso de esta moneda se encuentra en Kira Bermúdez.

La responsable de la tienda de ropa Showroom By Portofino, en la calle de San Andrés, dice que la decisión municipal supone una gran noticia para el sector del pequeño comercio. «Va a ser muy positivo -sostiene-. Lo que queremos es que la gente venga al centro, y todo el mundo sabe que uno de los problemas con los que se encuentra es que no puede aparcar el coche. Ahora habrá más plazas».

Kira rechaza de plano la idea de que el comercio funciona mal exclusivamente por la crisis. «Todo afecta -reflexiona-, y está claro que la gente tiene miedo y no consume como antes. Pero si a eso le ponemos trabas para que no vengan al centro, es mucho peor. Lo que hay que hacer es eliminar barreras y atraer a la gente a que acuda al centro. Que puedan pasear y entrar en uno y otro local. Hay párking, sí, pero cuesta, cuando no está todo ocupado. Además, las plazas que están más próximas a la salida son privadas».

Por ese motivo, la comerciante desearía que el Ayuntamiento hubiera ido incluso más allá: «Si van a poner aparcamientos de zona azul, bien. El aparcamiento exprés me parece una buena idea, pero pienso que es muy poquito tiempo. Lo limitan a 20 minutos como máximo. En ese tiempo no da tiempo a venir, probar, ver, ir a otra tienda. Creo que se podía hacer un poco mejor».

"La tercera vía..."

Pero la moneda también se puede ver de canto, en una especie de sí, pero no. «El bus va a llegar muchísimo más tarde, pero como pretendo sacar el carné en poco tiempo tampoco es que me perjudique mucho», explica Andrea Candamio, estudiante universitaria que, por ahora, usa el bus a diario. «Por las mañanas ya no funciona muy bien, y con esto, peor. Para los estudiantes es un caos, pero bueno, yo espero poder ir en coche pronto», comenta.>>