Nogueira tratará la retirada de la vía con vecinos del Ensanche

"¿Este Nogueira es dialogante?", le preguntaban ayer los afectados por el carril bus en Federico Tapia al presidente de la asociación del Ensanche, Gerardo Crespo. El representante vecinal mantendrá un encuentro el miércoles con el edil de Transportes para trasladarle las demandas de vecinos y comerciantes.

Medio centenar de implicados se reunieron por su cuenta el viernes en la iglesia de los Capuchinos, después de que los representantes de las asociaciones vecinales no se alinearan con su rechazo frontal a la nueva vía. Centenares de firmas de protesta recogidas desde su puesta en marcha avalan por escrito la demanda colectiva.

Después de una semana, Gerardo Crespo recibió en la sede de la asociación a una decena de implicados. "Si ocasiona tantas molestias, creo que se va a caer", apoyó el portavoz, que apostó en todo momento por "una solución intermedia". "No hay solución intermedia, tienen que eliminarlo", afirmó una de las vecinas durante el encuentro. "Echar marcha atrás en política es complicado", advirtió otro.

"¿Qué es lo que quieren?, ¿Es sólo una medida estética?", se preguntan ante los problemas generados en los últimos días tras la implantación del carril.
Aseguran que, además de los problemas diarios, la reorganización del tráfico pervierte "la naturaleza inicial de la calle" y muestran su temor de convertirse en un nuevo San Andrés, donde los cierres y traspasos se cuentan a pares.

"San Andrés ahora está muerto, la vida que tiene ahora no tiene nada que ver con la vida que tenía hace unos años", apuntan. Los presentes coinciden en que este es un momento "complicado para el comercio" y, por ello, el menos adecuado para poner en marcha el carril bus. "En cuatro años esta gente se va", auguran, "algunos en unos meses, según el tipo de negocio".

Vecinos y comerciantes insisten en que Federico Tapia es una calle "demasiado estrecha" y que no es una vía "que se deba usar para esto". Proponen como alternativa Linares Rivas, a su entender preparada para la separación del transporte particular y el público.

Por otro lado, Gerardo Crespo asumió que las medianeras provisionales azules hacen flaco favor a tráfico rodado y a viandantes: los autobuses pasan muy cerca de los peatones, invadiendo aceras en algunos lugares especialmente conflictivos. Los asistentes reiteraron también los problemas para realizar mudanzas o para que los camiones del gasoil suministren a los edificios de viviendas.

Fuente: La Opinión de A Coruña