En dos frentes está repartiendo la Xunta sus efectivos de lucha: por un lado, el conflicto que ha creado con el transporte, que se ha puesto en huelga este martes y miércoles, y que se repetirá la semana que viene, y así indefinidamente si no hay consensos...; y por otro lado, la cruzada consistente en introducir como sea al bus metropolitano en la ciudad, con la meta de eliminar coches. Amén.(...) La Voz de Galicia comenta algunas de las claves de la situación actual en esta segunda batalla:
El DOG daba cuenta esta semana de la aprobación definitiva del plan de transporte interurbano de la Xunta que permitirá que los buses de la comarca lleguen al centro de la ciudad haciendo paradas para bajar y recoger pasajeros.
El texto pasó por dos procesos de exposición pública y, cumplidos los trámites, está aprobado. Sin embargo, por el momento los buses no modificarán sus rutas. El visto bueno autonómico (el objetivo, según la Xunta, es de "aumentar el número de usuarios del transporte público en perjuicio del vehículo particular") no coincide en el tiempo con el visto bueno municipal, y sin este último -el Ayuntamiento tiene competencias de tráfico en el municipio- no entrarán esos vehículos en el centro.
¿En qué consiste el plan?
Actualmente en A Coruña los buses de la comarca pueden hacer parada en el centro solo hasta las nueve de la mañana. Los buses fueron sacados de la urbe y limitados a la estación de autobuses en su día para evitar problemas de tráfico. Los usuarios tenían que hacer transbordo* en la estación. Eso eliminó buses, pero aumentó el uso del vehículo privado porque resultaba más cómodo para acceder a la ciudad. Ahora la Xunta intenta el viaje contrario: que los buses puedan detenerse en determinadas paradas del centro en todas sus frecuencias para ofrecer un mejor servicio y quitar coches del centro.
*[interesante concepto el de "transbordo" en todo este lío...]
¿Por qué no se pone en marcha?
Durante meses, el Ayuntamiento y la Xunta hablaron de cosas distintas. Desde la Consellería de Infraestruturas ofrecían el proyecto, pero el gobierno local prefería empezar a negociar la creación de un área metropolitana y subordinaba el proyecto autonómico a ese otro objetivo. Las dos partes coinciden en la bondad de la idea, pero el consistorio exigía que se hiciera a su manera (tener, por escrito, la posibilidad de poder frenar la implantación del proyecto si el tráfico en la ciudad no evoluciona como debería) y las posturas se enrocaron.
¿Se podrá aplicar?
Tras un encuentro la semana pasada entre la conselleira Ethel Vázquez y el alcalde, Xulio Ferreiro, comenzó un cierto deshielo. Ferreiro se mostró durante semanas muy crítico con Vázquez. En esa reunión se acordó abordar los detalles del plan en una comisión bilateral Xunta-Ayuntamiento. Hoy jueves está previsto que se reunan técnicos de ambas Administraciones. En esencia, lo que quiere el consistorio es tener, por escrito, la posibilidad de poder frenar la implantación del proyecto si el tráfico en la ciudad no evoluciona como debería. La Xunta concedió esa posibilidad que ahora deberá plasmarse en un documento. Además, se empezará a preparar un calendario escalonado con el acceso de las líneas más importantes hasta completar las previstas, 43 en una primera fase.
¿Qué actuaciones quedan pendientes?
Además de ese pacto entre Administraciones, todavía están pendientes las obras de ampliación de las paradas de Entrejardines y de la plaza de Ourense, en la entrada del puerto. Para la primera de ellas dio licencia el consistorio la semana pasada. Ambas corren a cargo de la Xunta, tienen un coste menor y supondrán, básicamente, ampliar la plataforma para que varios buses puedan coincidir al mismo tiempo en esos lugares. Además, en Entrejardines se instalará también una nueva marquesina.
[la de la Cuesta de la Palloza ya está siendo ampliada enormemente, aprovechando alguna vieja reivindicación de los conductores de Tranvías; dos pájaros de un tiro...]
¿Cuándo podrán los usuarios dejar de pasar por la estación?
Todavía no hay fecha. En teoría el verano pasado los buses ya iban a acceder a la ciudad, pero no está claro si podrán hacerlo este verano o habrá que esperar más. Tanto las empresas de transporte como usuarios desean que eso se produzca cuanto antes, pero para eso falta que se limen los flecos descritos.
En paralelo, el alcalde quiere empezar a hablar del área metropolitana y ha exigido una reunión con Vázquez con los diez ayuntamientos del cinturón inmediato de la ciudad, no los 17 del área que marca la Xunta. También a eso Vázquez le dijo que sí, pero falta por establecer el encuentro y conocer sus resultados.
Fuentes:
La Voz de Galicia, 21/06/2017, Eduardo Eiroa
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