Cazada marquesina de espaldas a la calzada. Solución práctica y extendible.

Curiosa la noticia que resalta el Ideal Gallego... Lo cierto es que esta configuración de las marquesinas sí está presente en alguna ciudad por ahí, y seguramente se podría adaptar a alguna parada más de Coruña, en aras de organizar el espacio disponible, en este caso, idealmente:

Los vecinos del barrio de Las Flores pueden presumir desde esta semana de contar con la única parada de bus cuya marquesina está colocada de espaldas de la calzada.

La estructura se encuentra en la ronda de Camilo José Cela y llamó inmediatamente la atención del vecindario en cuanto se acabó de instalar.

Claro, en un primer momento, se sospechó que la empresa adjudicataria de las obras de la línea 4, Malvecín, habría podido cometer un error. Sin embargo, fuentes de la Concejalía de Movilidad aseguran que se trata de una decisión técnica.

“El problema era la acera, que allí es muy estrecha, así que no se podía colocar la marquesina en medio porque impediría el tránsito de personas con discapacidad o de cochecitos de ruedas”, aseguran desde María Pita. Los operarios se vieron obligados entonces a desplazar la instalación hace donde la acera se ensanchaba pero, aún así, resultaba incómodo para los viajeros por estar muy cerca de la calzada.

Al final, los técnicos se decidieron por esta solución. Por insólita que pueda parecer, desde la Concejalía de Movilidad aseguran que tiene precedentes en ciudades que presentan el mismo problema de aceras estrechas que A Coruña. Sin embargo, a medida que van haciéndose a la idea, algunos vecinos comprenden la explicación de Neira.

“A mí me parece bien, porque te permite estar a salvo de las salpicaduras de los coches cuando estás sentado”, comentó un vecino al comprobar la colocación.

Precisamente se está terminando las obras a lo largo de la línea 4, unos trabajos que comenzaron el mayo del año pasado y que tienen como objetivo convertir a esta ruta en un ejemplo que seguir con las demás. La línea 4 se escogió porque es una de las más largas y con más volumen de usuarios de la ciudad, ya que por ella pasa el 10% de los más de 20 millones de usuarios anuales del bus urbano.

Los fondos fueron proporcionados a cuenta del Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL), lo que significa que tendrían que haberse finalizado el año pasado. En todo este tiempo se han modificado totalmente 20 de las 41 paradas de la línea, con una inversión de 20.000 euros cada una. En otros 21 puntos se realizaron adaptaciones, con un coste medio de 1.000 euros.

Pequeños detalles, pero interesantes, importantes y a tener en cuenta. A priori, nos parece adecuado, vistas las opiniones y circunstancias...

Hay que apuntar unos detallitos que consideramos bastante a tener en cuenta en este caso en particular y ayudará a entender que no habrá problema para el usuario:

Esta parada es la del final del trayecto de ida, en Camilo José Cela (Bar Din Don). Y en esta parada solamente para la línea 4.

Con lo cual, no creemos que haya problema alguno: Habitualmente el bus llega con tiempo y se para unos instantes antes de proseguir su marcha, lo cual propicia que a cualquier usuario que pueda "despistarse" a causa de la colocación de la marquesina (raro, pero podría ser...) le da tiempo a enterarse de que el bus ha llegado ya. Y ,seguramente, si el conductor ve a alguno que, sentado en la misma, no da señales amagar con subirse, le daría el toque.

En cuanto a la accesibilidad y el paso de carritos, sillas y demás, huelga más comentario por nuestra parte, ya está todo dicho. Queda claro que todo encaja milimétricamente, ¿no?

Fuente: El Ideal Gallego y agalega.info