La empresa concesionaria del transporte público de Vigo, Vitrasa, ha retirado de la circulación los seis autobuses que funcionaban con biodiésel desde junio del 2005.
Después de una exhaustiva observación, la compañía detectó que los vehículos consumían y contaminaban más que los restantes, propulsados por gasóleo y gas.
El estudio desveló que los filtros de gasoil se tupían de manera anormal y provocaban la pérdida de fuerza e incluso la detención de los autobuses.
A raíz de este problema la compañía decidió reducir la frecuencia del cambio de los filtros de gasoil, pasando de 25.0000 a 10.000 kilómetros.
Según las conclusiones del informe, la utilización de biodiésel supuso un incremento del consumo de combustible que oscilaba entre los cero y siete litros por cada cien kilómetros, variable en función de parámetros como línea, conductor, vehículo y temperatura ambiente. Además, el consumo de los filtros del carburante se duplicó.
Aunque la flota de Vitrasa puede soportar hasta un 30% de biocombustible, el porcentaje se redujo hasta un 10%, algo que sin embargo no consiguió mejorar los resultados. La mayor parte se obtenía del reciclado del aceites domésticos y, en teoría, debería reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.
Tras este intento fallido, Vitrasa decidió continuar con la reducción de emisiones de gases a la atmósfera a través de la puesta en circulación de nuevos autobuses con motores Euro V y Euro IV. Estos permiten aminorar los óxidos de nitrógeno de los gases de escape y optimizar la combustión del motor para lograr una mayor potencia con un menor consumo y, por tanto, generar menos partículas y menos contaminación.
Dentro de las siete grandes ciudades gallegas, Lugo es la que más utiliza el sistema de biodiésel hasta llegar al 40% de la flota. Le sigue Santiago, mucho más testimonial, mientras que en el resto o no existe o es mínimo.
Un aspecto en el que la flota de Vitrasa figura a la cabeza de Galicia es en la accesibilidad de los autobuses para personas con discapacidad, al estar la totalidad de los vehículos adaptados.
Fuente: La Voz de Galicia
Te diré que aquí también se estaba utilizando hasta hace un mes, un que una noche al ir a repostar toda la flota, los filtros de los surtidores estaban todos tupidos, estuvieron toda la noche repostando en la gasolinera de Alfonso Molina, con lo cual lógicamente se ha dejado de usar el biodiésel, ya que una flota tan grande no puede estar a expensas del capricho de unos filtros.
ResponderEliminarEstábamos al tanto de la "anécdota" del desfile nocturno de buses por la ciudad, Pelouro. Pero desconocíamos el hecho de que ya se había desterrado el biodiesel. ¿Vuelta, pues, al gasoleo, así, sin más? ¿O cómo queda "la alimentación de la familia"?
ResponderEliminarEl biodiesel es un "fracaso" en general. Para mantener autobuses con este combustible se precisa de piezas específicas (los citados filtros) para ello, y conllevan un gasto de mantenimiento superior. Si Pelouro ha soltado eso le creo, y les compadezco, ellos llevan las máquinas en las que viajamos nosotros, y para que el viaje se haga en condiciones los motores de dichas máquinas tienen que estar siempre dando el máximo rendimiento. Si alguna pieza de estas máquinas falla, el viaje ya no se hace en condiciones, y tanto los usuarios como el propio busero que los lleva de aquí allá pillarán un cabreo de coj... jejejejeje.
ResponderEliminarBueno, creo que me he pasado demasiado con estas dos últimas frases... ¡Feliz año y que el 2010 nos traiga anécdotas beneficiarias para todos!