Si el Ayuntamiento es capaz de diseñar todos los carriles bus que sus estudios dicen que son viables, pocos barrios se quedarán sin el vial exclusivo para el transporte urbano. El Concello aseguró en marzo que el proyecto era factible en Juan Flórez, ronda de Outeiro, General Sanjurjo y un tramo de la avenida de Finisterre, tal y como informó este periódico. Ahora, la Concejalía de Tráfico amplía su propuesta al barrio de Matogrande.
El carril bus que ahora recorre Federico Tapia y San Andrés hasta Orillamar generó controversias en un principio, sobre todo entre los comerciantes, que se vieron afectados por el cambio de ubicación de las zonas de carga y descarga y porque, según denunciaron, perdieron clientela. Fuentes municipales han confirmado que la Concejalía de Tráfico encargó un estudio que incluye un profundo cambio de la circulación en Matogrande, basado en viejas reivindicaciones de los residentes en el barrio.
El Ayuntamiento considera viable implantar el carril bus desde la principal rotonda de acceso y por la calle Juan Díaz Porlier. El estudio diseña un vial exclusivo para autobuses desde la rotonda -un punto de importante densidad de tráfico, pues es el cruce de la avenida de San Cristóbal, Salvador de Madariaga y la ronda de Camilo José Cela- por Díaz Porlier, hasta la segunda glorieta, en el cruce con la calle Sebastián Martínez Risco, donde los buses girarán de nuevo hacia Díaz Porlier.
La llegada del carril bus a Matogrande suprimiría los aparcamientos de ambos márgenes en Juan Díaz Porlier, para que quede un tramo para el autobús urbano y otro para el resto de vehículos en ambas direcciones. La otra modificación prevista es implantar la ORA en varias calles del barrio, tal y como demandaron los vecinos: "Es para evitar que se utilice como barrio refugio para aparcamientos", destacan desde el Ayuntamiento.
El Gobierno municipal ya evaluó la posibilidad de llevar el carril bus a otras calles. Según los informes técnicos, es viable en General Sanjurjo -cuando el Concello concretó el estudio, su intención era que conectase esta avenida con Cuatro Caminos-. También existen otros puntos factibles donde implantar el carril bus, aunque con matices. Es el caso del tramo de la ronda de Outeiro que discurre entre la estación de tren y el cruce con la avenida de Gran Canaria, donde sería necesario suprimir los giros a la izquierda en la ronda.
Para la avenida de Finisterre, la posibilidad de implantar el carril bus es más complicada. El Ayuntamiento habló primero de crearlo en el tramo entre la plaza de Pontevedra y la ronda de Nelle, aunque ahora la principal opción que se estudia es que sólo vaya desde la plaza de Pontevedra hasta el cruce con las calles Médico Rodríguez y Fernando Macías, el único tramo de la avenida que sólo tiene carriles en dirección de bajada.
De ejecutarse el carril bus en la avenida de Finisterre, Tráfico tendría que suprimir un carril de circulación en el sentido de subida o las plazas de aparcamiento donde existan.
Esta posible remodelación excluiría al resto del tráfico; los turismos particulares no subirían por la avenida de Finisterre desde la plaza de Pontevedra, sino que tendrían que ir, como ocurre ahora, por Juan Flórez y girar a la derecha por Médico Rodríguez.
Fuente: La Opinión de A Coruña
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